En las últimas horas, el flamante presidente de la Nación, Alberto Fernández, dejó en claro la necesidad de avanzar en la declaración de la emergencia económica ante la grave crisis que vive el país. En la órbita bonaerense, el gobernador Axel Kicillof hizo lo propio al asumir y realizar un extensivo diagnóstico de las arcas estatales.
Así, los dos mandatarios buscarán que el Congreso y la Legislatura, respectivamente, acompañen las solicitudes para dar un paso adelante en la búsqueda de enderezar las finanzas públicas. En ese sentido, los anuncios no pasaron desapercibidos en el interior bonaerense, más precisamente en Chacabuco.
Es que, hace varias semanas atrás, el jefe comunal, Víctor Aiola, decretó la emergencia económica en el distrito de la Cuarta Sección y despertó varias disputas políticas con la oposición. Inclusive, en la asunción de su segundo mandato el dirigente de la Unión Cívica Radical fortaleció el discurso y remarcó la necesidad de avanzar en esa sintonía ante las críticas de sectores opositores.
'Algunos se sorprenden porque hemos declarado la emergencia económica, pero eso no fue más que reconocer un estado de situación que por más esfuerzo que hicimos nos terminó sobrepasando en lo económico, como le ocurrió a cada uno de los vecinos en sus casas", sostuvo el alcalde al lanzar dardos a la oposición. De esa manera, remarcó: "tenemos que tratar con total austeridad los fondos municipales para que nunca el trabajador sea una variable de ajuste. Necesitamos seguir ordenando la municipalidad, queremos un municipio independiente de cualquier ayuda y con el esfuerzo diario podamos serlo".
Claro, la decisión de Fernández y Kicillof caló hondo en el peronismo chacabuquense que había levantado la voz contra la emergencia económica. Cabe destacar que, desde el espacio que lidera Julián Domínguez se reprochó la declaración comunal como una 'excusa para ajustar'.
En ese sentido, desde el entorno de Aiola celebraron las decisiones del Presidente y Gobernador como un gesto del rumbo a seguir en materia económica y un golpe político a la oposición pejotista que sumó un nuevo revés tras las caídas electorales en línea.