Un hombre de 88 años se subió a una grúa para poder ver a su esposa, quien se encuentra aislada en un geriátrico en Estados Unidos. La familia del hombre, al notar que estaba triste por no tener cerca a la mujer con la que está casado desde hace 61 años, decidió unirse y ayudarlo a cumplir su anhelo.
Con motivo de la cuarentena obligatoria para intentar frenar la propagación del coronavirus en todo el mundo, un centro de la tercera edad de Massachusetts cerró sus puertas para proteger a sus pacientes. Esto hizo que Nick Avtges, cuya esposa Marion Avtges de 85 años y está internada ahí, sintiera una profunda tristeza dado que la visitaba todos los días.
Luego de hablar con el director del asilo y conseguir el visto bueno, prosiguió con todos los pasos para que sus papás pudieran verse al menos desde una ventana.
La historia la dio a conocer la nieta de Nick y Marion, quien compartió el video del gran momento del reencuentro.
'Mi abuelo no pudo visitar a mi abuela desde que su hogar de ancianos cerró debido al COVID-19, así que por el gran poder de la mente de mi papá (y sus amigos) pudieron organizar para que pudieran verse. Algo de contenido saludable en medio de la cuarentena', escribió la joven.