El acceso Juan XXIII está cerrado pero sin custodia, eso genera que mucha gente lo utilice para entrar y salir de manera ilegal.
Habría que contemplar poner una garita policial en cercanías del montículo, de esa manera podría estar controlado un lugar que es un colador y tierra de nadie ya que todo el tiempo recibimos mensajes de picadas de autos y motos.