Este viernes, la Argentina comenzará a disputar la serie de playoffs de la Billie Jean King Cup, el torneo por equipos más importante del tenis femenino, ante Eslovaquia en condición de visitante. Será una cita especial para Nadia Podoroska, que una vez más podrá jugar junto a su pareja, la también tenista Guillermina Naya.

La diversidad sexual hace tiempo que se ve reflejada y se vive con naturalidad en los deportes femeninos. Hay incontables casos de tenistas, futbolistas y jugadoras de hockey o básquet, entre otras, que se han declarado como lesbianas o bisexuales y que no mantienen en secreto sus relaciones afectivas con mujeres. Distinto es en el caso de los varones: en las disciplinas masculinas persiste un tabú muy grande.

En diálogo con TN desde Bratislava, antes de debutar en el torneo, Podoroska (78° del ranking de la WTA) habló de su vínculo con Naya (371°), de la posibilidad de compartir equipo y de los cambios sociales que aún hacen falta para que el deporte pueda ser más empático y diverso en todas sus ramas.

En octubre del año pasado, cuando Nadia había hecho público su noviazgo con Guillermina, Billie Jean King le había dedicado un fuerte mensaje de respaldo en las redes sociales. 'Felicitaciones a la jugadora de la WTA Nadia Podoroska por su anuncio. Vivir de manera auténtica requiere mucho coraje pero vale la pena hacerlo'.

El desafío de compartir equipo con su novia

'Lo especial es que podemos compartir una semana tan linda en la Billie Jean King y estar juntas. Al ser tenistas las dos, son pocas las semanas en el año en las que nos podemos ver. Tenemos la suerte de hacer lo mismo y poder estar en el equipo argentino juntas es un sueño hecho realidad. Creo que no podría ser mejor'.

La diversidad sexual, un tabú entre los deportistas varones

'Hay una cuestión en la visibilidad, en la naturalización', consideró Nadia. Y argumentó: 'Un poco la masculinidad en sí sigue siendo muy fuerte. Se habla tanto del patriarcado y es importante luchar contra él porque sigue muy arraigado'.

'De la boca para afuera se habla mucho de ser más abiertos y abiertas, de poder expresar lo que uno siente con libertad, pero para adentro me parece que todavía cuesta bastante. Se ha avanzado muchísimo, pero creo que todavía hay mucho más cambios por hacer', señaló.

Y, sobre esta negativa o temor de los deportistas varones de distintas disciplinas a mostrarse: 'Yo respeto a quien quiera hacerlo público o visible y al que no, me parece que cada uno hace lo que quiere con su vida'.

El pedido de apoyo al público al equipo argentino

'Como toda competencia por naciones, la Billie Jean King Cup tiene el condimento del corazón, la garra y la actitud que hacen la diferencia. No es una semana común de circuito: en estas competencias hay mucha emoción en el público y acá en Eslovaquia lo vamos a tener en contra. Sería importante saber que contamos con el apoyo de la gente a través de la pantalla', se ilusionó.