IMAGINATE.
Imagínate, que llegas a vivir a un barrio hace 8 o 9 años, por que decidís emprender un proyecto de futuro, pones todo y te empeñas porque apostas a eso y que ese Barrio como es 'nuevito' requiere de ciertas cosas o mejoras que es necesario empezar a gestionar.
Imagínate que esas mejores o recursos, tardan un poquito en llegar, pero te autoconvences de que esas cosas pasan, y algunas las empezás hacer vos junto a vecinos, y ya cedes parte de tus ahorras o ingresos. La idea es estar cada un día un poco mejor.
Imagínate, que ya no alcanza con el esfuerzo de los vecinos, ni con lo que podes aportar económicamente por que los valores cambian, y porque te das cuenta que hay algo o alguien que debería estar ocupándose. Recurrís a gestionar o pedir al Estado, en nuestro caso en el Municipio.
Imagínate que para tus 'demandas barriales' te digan de hablar con distintas personas que ocupan lugares de funcionarios. Pensas, Uy buenísimo! A varios los conocemos de chicos, de la ciudad, o porque compartiste algo alguna vez, capaz es más fácil. Pero imagínate, que capaz no es tan fácil y a excepción de alguna que otra persona que decidió ocuparse hasta donde pudo aunque no era de su competencia, no pudiste llegar. Empieza la tan utilizada burocracia.
Imagínate que en tu barrio siguen sucediendo cosas, necesitan arreglos, recursos básicos por tener; y que nadie se haga eco y diga, es mi responsabilidad por que ocupo un cargo público y me pongo a trabajar en lo de ustedes. Empiezan los intentos de conversaciones cada vez más insistentes, pero no se logran concretar.
Pará!, imagínate que después de muchos intentos, muchos sellados en mesa de entrada del municipio para emitir notas/reclamos (que son siempre los mismos), y nunca son respondidos; se te da! Y alguien de todas esas personas que están en esos lugares, decide escucharte. Te responde, que no se puede, que las partidas presupuestarias, que están en conflicto con empresas o entes (literal no se hablan entre sí), que depende de Pcia. O Nación (cómo si el Estado no fuera solo uno), que te facilitan mails o teléfono para que te ocupes vos de gestiones que deberían hacerse desde una oficina pública, etc., etc. Imagínate que toda esa BUROCRACIA, la sentís como un alivio y decís, 'al menos esta vez nos atendieron'; por que venimos llamando a varias funcionarios los últimos 3 años y desde estos últimos meses no te podes comunicar, ¿será que no les anda bien el teléfono o no atienden la llamada? Bueno, al menos alguien nos escucho.
Imagínate que esas cosas o reclamos son, luminaria en las calles, mayor seguridad por que te roban mientras estas en la cocina de tu casa, arreglos de calles de tierra, el regador en verano, etc. Imagínate que en el medio de todo eso, te dan el notición que una calle de tu barrio la van a asfaltar hasta el final para que puedas salir de tu casa dignamente los días de lluvia.
Pero, ahora imagínate que ese asfalto nunca sucedió. Que las máquinas que trabajaron un par de semanas tan enérgicamente, un día se fueron, dejaron la calle un desastre y ahora sí, literal no podes salir ni de a pie por que te 'enterrás'. Ahí, el Barrio decide llamar nuevamente A LOS FUNCIONARIOS que debían ocuparse de esto. Vienen a ver, te dicen que está lleno de pozos, que es verdad que no se puede estar así, que tuvieron un inconveniente con la empresa y ese contrato cayó, y que bueno ya no hay más plata (para esto, pero ves que para otras cosas sí), y que lo máximo que van a poder hacer es devolver las piedras para esas calles, esas mismas que se llevaron hace unos meses cuando estaban las máquinas. Pensas, a nada, esperamos las piedras!. Imagínate que todavía las estas esperando porque concretamente, nunca las devolvieron. Imagínate como está hoy esa calle después de la lluvia.
Y por último en el medio de toda esta historia, IMAGINATE que aparecen a darte las buenas vibras y promesas, gente que se dice política, gente que está, que estuvo y que se postula para estar en Diciembre 'por que ellos tienen el poder de hacerlo posible'.
IMAGINATE, que después de todo, relatos incumplidos, promesas de campaña, etc., lo único que te queda es pedirles públicamente a los que están y a los que vienen que dejen de hablar tanto y hagan más; que ellos representan al Estado y no lo hacen gratis, todos les pagamos el sueldo; por lo tanto solo resta TRABAJAR. IMAGINATE si esto último sucediera, nuestro barrio, nuestra ciudad, nuestro país, hoy no tendría otra historia.
Vecinos Barrio Procrear.