Fue su primera obra. El inicio de un ciclo exitoso que aún se mantiene vigente. El 1 de mayo de 2005 Lionel Messi anotó el primero de sus 627 goles con el Barcelona. Lo hizo en La Liga, ante el Albacete, en un partido en el que había entrado al terreno de juego en el minuto 87 en reemplazo de Samuel Eto'o, quien también había marcado para el Culé.
El rosarino festejó en el minuto 90 con una gran asistencia de Ronaldinho. Una acción que tuvo que repetirse, porque unos instantes previos el argentino observó cómo le anularon su tanto por una posición adelantada.
El astro internacional se estrenó como goleador con el Blaugrana en el Camp Nou, en el que fue su noveno encuentro con la camiseta del conjunto catalán. El festejo frente al Albacete fue solo el primero de los 438 goles que ha marcado en la competición doméstica, convirtiéndose en el máximo goleador histórico en La Liga.
En la campaña de su debut, 2004/05, Messi solo disputó siete encuentros y su único gol fue el que anotó contra el elenco de Castilla La Mancha. El argentino se fue afianzando y a partir del 2008 se transformó en un referente del equipo español.