Un efectivo de la ciudad santiagueña de Río Hondo fue detenido en las últimas horas después de publicar un video en su estado de WhatsApp en el que se lo veía abusar sexualmente de la hija de su pareja, una adolescente de 16 años.
El aberrante caso salió a la luz gracias a un error del propio acusado y fue una vecina del barrio la que, al advertir la actualización, fue directamente a la casa del policía a increparlo. El video fue presentado después como evidencia por la madre de la víctima y novia del hombre, con quien además tiene otro hijo de un año en común.
Tras la denuncia, el juez de Control y Garantías de la Circunscripción Río Hondo y Jiménez, Diego Vittar, resolvió ayer en una audiencia convertir la simple aprehensión en detención por quince días del policía, imputado por el delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado por la situación de convivencia.
Según indicó una fuente cercana a la causa a Nuevo Diario, la adolescente empezó a ser acosada por su padrastro hace varios meses. En ese sentido, la víctima sostuvo que el hombre abusaba de ella entre tres y cuatro veces por semana y siempre de madrugada, mientras su mamá y su hermano dormían.
El último ataque, el mismo que provocó la detención del abusador, ocurrió recientemente una noche mientras la adolescente estudiaba todavía en su habitación. El hombre entró, se sentó en su cama y empezó a abusarla. La víctima nunca se dio cuenta que, en esa oportunidad, él también la estaba grabando con su celular.
El teléfono del acusado fue secuestrado por los investigadores y de poco sirvió su tibio intento de justificación, al afirmar que nunca fue su intención viralizar las imágenes de la menor.
Por otra parte, en forma paralela al arresto, se supo que la esposa del efectivo y madre de la víctima expresó su deseo 'de no volver a verlo'. En ese sentido, hizo una presentación en la que solicitó la restricción y distanciamiento total del uniformado y que la Justicia se encargue de darle un régimen de visitas para el hijo que tienen en común.